Un centro de rehabilitación de drogas es un espacio especializado en ofrecer apoyo profesional a personas que viven con adicciones y buscan recuperar su salud física, emocional y social. Estos centros trabajan bajo programas integrales que combinan terapia psicológica, acompañamiento médico, intervenciones familiares y procesos de desintoxicación controlados.
El objetivo es que cada paciente pueda enfrentar las causas de su consumo, fortalecer su autocontrol y crear una nueva estructura de vida sin dependencia. También se trabaja el área emocional, ayudando a reconstruir hábitos, mejorar la autoestima y desarrollar herramientas para prevenir recaídas.
El centro se convierte en un entorno seguro y guiado por especialistas preparados para brindar apoyo continuo durante todas las etapas del tratamiento.